Debido a que nosotras trabajamos
con niños preescolares, tenemos una gran herramienta para potenciar el lenguaje
oral de nuestros alumnos. Esta herramienta son los cuentos y poemas que podemos
trabajar con ellos.
¿Por qué la lectura de cuentos y/o poemas, favorece el desarrollo del lenguaje oral? Contar cuentos y las estrategias relacionadas con esta actividad, integra las diversas inteligencias. Combina las habilidades cognitivas del hemisferio lógico del cerebro con los procesos creativos del otro hemisferio, involucrando al cerebro completo en la experiencia, favoreciendo con ello el aprendizaje.
Cuando los niños escuchan una narración se activan su imaginación y se conectan con sus emociones. Esto ayuda a potenciar la retención del conocimiento a largo plazo ya que cuando se crear una relación afectiva con algún conocimiento, éste perdura en el tiempo, lo cual favorece la comprensión y utilización de éste en otros contextos.
Además, los cuentos y poesías permiten que los niños ordenen ideas, información y conceptos, los cuales, pueden ser adquiridos tanto por el lenguaje oral como por el gestual o por las imágenes que el texto presente. Permiten crear hipótesis y luego corroborarlas, trabajar el pensamiento inferencial, entre otras habilidades cognitivas superiores.
Un aspecto relevante que sucede cuando un niño escucha una historia, es la formación de imágenes mentales. Esto es importante ya que está estrechamente relacionado con las imágenes mentales que el niño se formará cuando lea de manera silenciosa.
Por lo dicho anteriormente, la invitación que hace este curso, es utilizar los cuentos y poemas como una poderosa herramienta para trabajar los aspectos del lenguaje oral en contexto, especialmente la conciencia semántica y el vocabulario.
Les dejo este hermoso video que grafica el poder que tienen los libros en el desarrollo del lenguaje oral de los niños.
¿Por qué la lectura de cuentos y/o poemas, favorece el desarrollo del lenguaje oral? Contar cuentos y las estrategias relacionadas con esta actividad, integra las diversas inteligencias. Combina las habilidades cognitivas del hemisferio lógico del cerebro con los procesos creativos del otro hemisferio, involucrando al cerebro completo en la experiencia, favoreciendo con ello el aprendizaje.
Cuando los niños escuchan una narración se activan su imaginación y se conectan con sus emociones. Esto ayuda a potenciar la retención del conocimiento a largo plazo ya que cuando se crear una relación afectiva con algún conocimiento, éste perdura en el tiempo, lo cual favorece la comprensión y utilización de éste en otros contextos.
Además, los cuentos y poesías permiten que los niños ordenen ideas, información y conceptos, los cuales, pueden ser adquiridos tanto por el lenguaje oral como por el gestual o por las imágenes que el texto presente. Permiten crear hipótesis y luego corroborarlas, trabajar el pensamiento inferencial, entre otras habilidades cognitivas superiores.
Un aspecto relevante que sucede cuando un niño escucha una historia, es la formación de imágenes mentales. Esto es importante ya que está estrechamente relacionado con las imágenes mentales que el niño se formará cuando lea de manera silenciosa.
Por lo dicho anteriormente, la invitación que hace este curso, es utilizar los cuentos y poemas como una poderosa herramienta para trabajar los aspectos del lenguaje oral en contexto, especialmente la conciencia semántica y el vocabulario.
Les dejo este hermoso video que grafica el poder que tienen los libros en el desarrollo del lenguaje oral de los niños.
Importante información, gracias por compartirla.
ResponderEliminarMe gustaría establecer una relación además entre lenguaje oral, comprensión lectora y vocabulario.
Relación entre lenguaje oral, vocabulario y comprensión lectora
De acuerdo a numerosos estudios como el realizado por Senéchal, Ouellette y Rodney (2006), citado en Villalón (2008), el éxito en la comprensión lectora en niños de primero básico estaría explicado por la conciencia fonológica (la cual le permite a los niños dominar los componentes fónicos del lenguaje oral y asociación con la escritura), decodificación de palabras simples y conocimiento del alfabeto. No obstante, en tercero básico, el nivel de vocabulario explica en gran medida el grado de comprensión lectora. “Estos resultados permiten concluir que el vocabulario receptivo tiene una influencia indirecta sobre el aprendizaje formal de la lectura en un nivel inicial y una influencia directa sobre la comprensión en los niveles posteriores”. Desde otra perspectiva, la autora plantea la existencia de evidencia empírica que demuestra que el aprendizaje de la lectura contribuye en el desarrollo del lenguaje oral, aportando un procesamiento fonológico y dominio de los aspectos semánticos y sintácticos más acabado.
Según Villalón (2008), un adecuado entorno lingüístico que promueva el desarrollo del lenguaje es fundamental, especialmente en las etapas iniciales de vida, donde alrededor de los cuatro años de edad, el volumen de vocabulario de un niño tiene directa relación con la cantidad de palabras que utilicen sus padres. Además, estudios experimentales presentados por la autora, muestran que, niños que poseen menor vocabulario inicial, en el futuro aprenderán menor cantidad de palabras que aquellos que poseen un nivel más alto. Estas diferencias de uso en el lenguaje estarían dadas principalmente por el nivel socioeconómico. Las madres provenientes de niveles socioeconómicos más altos utilizan mayor cantidad de vocabulario. Clemente y Villanueva (1999) establecen que el enfoque sociocomunicativo otorga un valor fundamental al papel desempeñado por los adultos responsables de los niños en relación al lenguaje ya que “los niños adquieren la lengua de su entorno gracias a la acción solícita y socializadora de sus adultos de crianza”.
Por otra parte, Orellana (2010) postula que aprender a leer, el niño necesita conocer el principio alfabético y ser capaz de relacionar los signos gráficos con el sonido que cada uno representa. Además de esto, en el aprendizaje de la lectura, es indispensable potenciar la metalingüística en el niño con el fin de que puedan manipular de manera consciente los componentes semánticos, sintácticos y fonológicos. Villalón (2008), a lo anterior, agrega que el propósito de la lectura no radica en la simple decodificación, sino en la capacidad de extraer el significado del texto, lo cual “se basa en el desarrollo del lenguaje oral, el conocimiento del área de contenido abordado en el texto y de las características de los textos mismos”.
ResponderEliminarSegún Villalón (2008) para aprender a leer, además de la decodificación, se deben desarrollar los siguientes aspectos:
1. Vocabulario: conocimiento y uso del significado de las palabras.
2. Estructuras sintácticas y semánticas del lenguaje: conocimiento de las relaciones entre las palabras, que complementa el conocimiento de su significado.
3. Conocimiento de lo impreso y conocimiento textual: abarca los diferentes tipos de texto y de las formas características de presentación de los textos escritos.
4. Conocimientos temáticos: el volumen de conocimientos que el lector tenga acerca del contenido tratado en el texto es un componente fundamental en el proceso de comprensión.
5. Control sobre los procedimientos aplicados, monitoreo de la comprensión y revisión de los errores.
6. Interés sostenido y motivación hacia la lectura con distintos propósitos.
(Villalón, 2008).
Además, Cooper (1998), define a las habilidades de comprensión lectora como las diferentes tareas en las que el lector se focaliza para enfrentar un texto. Entre ellas se encuentran las habilidades de reconocimiento de claves para entender el texto, donde influye el vocabulario, identificar relaciones entre hechos de una narración, los detalles relevantes, la idea central y los detalles que la sustentan, las relaciones entre las diferentes ideas contenidas en la información. Además el autor menciona las habilidades para relacionar el texto con las experiencias previas, donde cobra importancia la capacidad de hacer inferencias (usar la información que no está explícita en el texto), realizar una lectura crítica (emitir juicios de lo que se lee) y la capacidad de regulación (técnicas para determinar si lo que se lee tiene sentido utilizando resúmenes, clasificaciones, predicciones, entre otros).
ResponderEliminarExcelente aporte Debi, muy claro. De lo que planteas se puede extraer la importancia que tenemos como educadoras de párvulos en potenciar las habilidades del lenguaje oral en nuestros niños, con el fin de que sean futuros buenos lectores y escritores. Si a un niño no se le estimulan las habilidades que tu mencionas, es muy difícil que en los primeros años de escolaridad pueda cumplir con éxito los desafíos escolares. Es por esto que es prioritario que las educadoras de párvulos conozcan de esta temática y sepan cómo implementar estrategias para desarrollar el vocabulario, la conciencia fonológica, la comprensión, la expresión oral, la conciencia semántica, etc.
ResponderEliminarSaludos
Debemos utilizar todas las estrategias posibles y a nuestro alcance para potenciar el desarrollo de las habilidades psicolingüísticas en nuestros niños, y este blog es una excelente instancia para compartir información y actividades.
ResponderEliminarMuchas gracias